“Cuentos de la muerte de Arturo y el Mabinogion” de Beatrice E. Clay


El Mabinogion no es un demonio del averno sino una colección de escritos medievales galeses. No insinúo que ninguno de mis lectores haya pensado lo contrario pero, por si acaso, lo dejo claro. 

Esta recopilación de mitos artúricos cubre en sus escasas 250 páginas el ciclo completo, desde el nacimiento de Arturo hasta su muerte, incluyendo algunos relatos poco conocidos, como el trágicos destino de los caballeros Balan y Balin o el de Sir Geraint y su mujer. Eso si, es una versión políticamente correcta: el amor de Lanzarote por Ginebra es completamente platónico, todo lo demás son calumnias y maledicencias, que serán las que acaben causando la caída de Camelot y, por lo que se cuenta, sir Galahad no debía de ser el único caballero casto y puro, por lo menos, durante su soltería. 

El estilo de Beatrice E. Clay es sencillo y eficiente, muy agradable y fácil de leer, excepto por las escenas de combates, en los que repite una y otra vez los mismos lugares comunes. Es fácil, en medio de un combate, despistarse y creer que se está volviendo a leer un capítulo anterior, porque repite las mismas palabras en cada duelo. 

Aunque me ha gustado más que la versión de Howard Pyle, con la que tiene algunos puntos en común, el punto débil de este libro es que no se puede considerar una novela, ni tampoco una antología de relatos. Beatrice E. Clay no pretende recontar los mitos a su manera, ni añadir ningún detalle personal. Se limita a transcribir las historias a un lenguaje más moderno y eliminar los detalles escabrosos. 

No creo que aún exista un niño así, pero, si lo hubiera, éste sería un libro adecuado para un niño que estuviera fascinado con la leyenda del rey Arturo y sus caballeros. Tal vez, también, para un interesado en la mitología medieval que tuviera dudas sobre si profundizar en el estudio del ciclo artúrico o no, pues da una imagen bastante completa y general, pero su público objetivo abarca poco más. Es un libro de texto, un índice de hechos y personajes.

Comentarios

  1. El típico comentario de abuelo: "dudo que haya hoy en día niños fascinados por las historias del rey Arturo". Claro, porque los niños hoy en día ya no son como los de tu época, que esos eran los buenos. A no ser que le hubieran preguntado a los abuelos de cuando eras niño. Para aquellos ellos habían sido los niños buenos. E igual para sus abuelos. E igual para... si todas estas ideas carcas de señor desencantado con la vida fueran verdad, que habría sido de la humanidad.
    Los niños siguen soñando como soñabas tú, y siguen siendo niños. Hoy y siempre la infancia será infancia.

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