Despedidas 1: BattleStar Galactica: El plan


Durante la semana que ha discurrido entre el 10 y el 16 de Mayo del 2010, he terminado mi relación con varias series de televisión, algunas de las cuales llevaban varios años en mi vida. Parece una buena ocasión para inaugurar una sección televisiva.

El remake de "Galactica" fue la gran esperanza blanca de las series de ciencia ficción. Una srie de ciencia ficción adulta, bien rodada, de modo moderno, ausente de la teatralidad estandarizada por Star Trek, espectacular y a la vez con personajes creíbles, violenta, cruel en ocasiones, con sexo, situaciones dificiles, oscuridad y ambiguedad moral y una intriga omnipresente que hacia que el espectador se comiera las uñas intentado dilucidar quien movía verdaderamente los hilos.

Todo ello se fue a la mierda en el famoso final "God do it", durante la última temporada. Los conflictos morales, el análisis de las situaciones limites en la sociedad y sus consecuencias en el individuo dio paso a a reiterativas y pretenciosas parrafadas sobre Dios, el destino, la fe y la eternidad y otros grandes y profundos temas, que no se puede decir siquiera que fueran tratados con superficialidad, porque es que ni siquiera eran tratados, solo se mencionaban para que el espectador con ínfulas intelectuales creyera que estaba ante algo muy inteligente y cargado de significado, mientras acallaba los bostezos y esperaba con cada vez mayor impaciencia que empezaran las batallitas espaciales. Confieso que conmigo lo consiguieron durante bastante tiempo.

"El plan" es el postre de tan insípida comida. Viene a ser la historia de las dos primeras temporadas, si calculo bien, contada desde el punto de vista de los Cylon. Es una mera curiosidad, sin mayores pretensiones. Visualmente impactante, es tremenda la calidad que están alcanzando los efectos especiales de la televisión, el argumento no tiene sentido ni importancia para nadie que no haya visualizado la serie. Aunque no carece de algún momento brillante, una buena aproximación será decir que el argumento es una mierda, solo apta para frikis.

Aunque no se puede negar que aclara un poco lo ocurrido en la serie, cuya trama principal también se vio muy perjudicada por giros de guión demasiado inesperados y cliffhangers tan espectaculares que rompieron por completo cualquier esperanza de coherencia, dicha aclaración, en suma, se consigue a base de traicionar una de las premisas fundamentales de aquellas temporadas:

A saber, durante esa época vivíamos bajo la ilusión de unos cylon todopoderosos escondidos en la sombra, que estaban en todas partes, lo sabían todo, y lo manipulaban todo. Sus saboteadores podían atacar en cualquier lugar, de modo totalmente imprevisto, y el espectador hervía de frustración cuando contemplaba como hasta los eximios triunfos que conseguían nuestros héroes, a costa de grandes sacrificios, parecían de un modo u otro trabajar a favor del enemigo. Este telefilme nos descubre que todo eso era falso, que solo había cuatro gatos infiltrados de mala manera, reticentes a dar cualquier paso, y sus triunfos fueron fruto principalmente de la casualidad. O de Dios supongo.

En resumen: !LOS CYLON NO TENÍAN UN PLAN!

Aparte de estar formados por niños malcriados enrabietados y manipuladores, y mansas ovejas de rebaño que se dejaban manipular hasta el matadero.

No se lo que me ha hecho ver esto, después de la gran decepción que supuso su final, pero bien está lo que acaba de una maldita vez, y yo he acabado con este universo ficticio, no pienso malgastar ni un minuto de mi vida con Caprica, y aconsejo a mis hipotéticos lectores que no lo hagan. Sin duda el mayor bien que esta serie acabó haciendo a la ciencia ficción televisa, fue demostrar lo buena que era Babylon 5.

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